Diagnóstico por ultrasonido de la aterosclerosis carotidea
La estenosis de la arteria carótida (CAS), un estrechamiento aterosclerótico de las arterias carótidas extracraneales, es un factor de riesgo de accidente cerebrovascular isquémico. Lo que lo hace clínicamente significativo.
El hallazgo clínico de un soplo carotídeo en la auscultación es inespecífico; por lo tanto, la CAS hemodinámicamente significativa no se puede determinar mediante un examen físico solo
De las modalidades de imagen disponibles para el diagnóstico de CAS, Ultrasonido doppler se utiliza a menudo porque no requiere radiación ni contraste intravenoso y es relativamente económico en comparación con la tomografía computarizada y la angiografía por resonancia magnética.
En consecuencia, la estenosis carotídea por ultrasonido es la técnica de diagnóstico más común. Los cambios en la velocidad del flujo sanguíneo en el punto de máxima estenosis, junto con los cambios hemodinámicos en las regiones proximales (arteria carótida común) y regiones distales (carótida interna postestenótica, arteria oftálmica y el círculo de Willis), nos permiten medir con precisión la estenosis carotídea.
Además, la evaluación ecográfica de la enfermedad aterosclerótica de la arteria carótida se ha convertido en la primera opción para el cribado de la aterosclerosis carotidea, lo que permite evaluar tanto la apariencia macroscópica de las placas como las características del flujo en la arteria carótida.
¿Qué ecógrafo se utiliza para el diagnóstico de aterosclerosis carotidea?
La estenosis arterial debe valorarse preferentemente mediante ecografía Doppler color. SIFULTRAS-3.3 para capturar imágenes de la pared arterial en planos longitudinal y transversal. Las imágenes longitudinales pueden ser difíciles de capturar en algunos pacientes y, en tales casos, puede ser útil obtener una proyección coronal de la arteria colocando el transductor detrás del esternocleidomastoideo. La observación de la pared arterial es un medio para medir el grosor de la íntima-media carotídea y determinar si puede haber placa de ateroma y dónde.
La estenosis carotídea generalmente se diagnostica mediante una ecografía de las arterias del cuello. Esta es la primera opción de diagnóstico por imágenes y generalmente se usa para seguimiento y observación, ya que no implica radiación ni agentes de contraste que puedan causar reacciones alérgicas.
Un estudio de ultrasonido Doppler, una técnica que evalúa el flujo sanguíneo a través de un vaso sanguíneo. Por lo general, es parte de este examen. Se utiliza con mayor frecuencia para examinar a los pacientes en busca de bloqueo o estrechamiento de las arterias carótidas.
Las técnicas de imagen vascular utilizadas para diagnosticar la estenosis carotídea han avanzado considerablemente en los últimos años, especialmente la imagen ecográfica. Aunque diferentes grupos de consenso de expertos han intentado establecer criterios para el diagnóstico y cuantificación de la estenosis carotídea mediante ecografía, no se ponen de acuerdo sobre qué parámetros hemodinámicos deben utilizarse.
Referencias: Evaluación ecográfica de la enfermedad aterosclerótica arterial carotídea, Medición ecográfica de la estenosis carotídea: recomendaciones de la Sociedad Española de Neurosonología, Ultrasonido - Vascular, Ecocardiografía o ecografía de aterosclerosis carotidea.
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